Las muertes por sobredosis de drogas disminuyeron el año pasado en Estados Unidos a medida que menos personas perdieron la vida por el fentanilo y otros opioides, lo que marcó la primera vez que el número de muertes disminuyó en cinco años, según estimaciones recientemente publicadas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Los funcionarios federales dijeron que las cifras muestran una disminución del 3% en las muertes estimadas por sobredosis entre 2022 y 2023. Esa caída equivale a casi 3.500 muertes menos en Estados Unidos que el año anterior.
Las nuevas cifras son provisionales y aún podrían actualizarse. Incluso una ligera disminución podría ser un bálsamo para un país donde las sobredosis de drogas han cobrado un precio devastador: en una encuesta, más del 40% de los adultos dijeron que conocían a alguien que perdió la vida por una sobredosis de drogas, según un estudio de Rand publicado este año.
Grupos comunitarios y funcionarios de salud que enfrentan el devastador costo del fentanilo han presionado para equipar a más personas con naloxona, un medicamento que puede detener las sobredosis de opioides y que comúnmente se vende como aerosol nasal bajo la marca Narcan. Los funcionarios del condado de Los Ángeles, por ejemplo, dieron crédito al esfuerzo por repartir Narcan en las calles cuando anunciaron la semana pasada que las muertes por sobredosis habían dejado de aumentar entre las personas sin hogar.
Pero incluso cuando las muertes en Estados Unidos relacionadas con el fentanilo y otros opioides disminuyeron entre 2022 y 2023, el país experimentó un aumento en las muertes relacionadas con estimulantes como la metanfetamina y la cocaína, según las nuevas estimaciones.
Y no en todas las partes del país se produjo una caída general de las sobredosis mortales. “En la costa este y en el medio oeste, estamos viendo disminuciones, pero en la costa oeste, particularmente en la parte superior del noroeste, todavía estamos viendo aumentos”, dijo Farida Ahmad, científica de la salud del Centro Nacional de Estadísticas de Salud.
Las cifras federales muestran que en California, el número estimado de muertes por sobredosis siguió aumentando en 2023 en comparación con 2022, aumentando un 4,1%. En Oregón y Washington, los aumentos fueron significativamente más pronunciados.
El consumo de drogas puede diferir de una región a otra, lo que determina las sobredosis y muertes subsiguientes: el fentanilo llegó al este de Estados Unidos antes de extenderse al oeste, y el consumo de metanfetamina en general ha sido más común en la costa oeste.
Las estimaciones federales publicadas el miércoles no detallan cuántas muertes relacionadas con la metanfetamina también involucraron otras drogas, un fenómeno que ha ganado creciente atención a medida que los estadounidenses mezclan drogas, tanto a sabiendas como sin saberlo. En el condado de Los Ángeles, por ejemplo, un informe reciente indicó que en 2022, casi la mitad de las muertes por sobredosis entre personas sin hogar involucraron tanto metanfetamina como fentanilo.
Tal como están las cosas, no existen medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos para tratar la adicción a la metanfetamina, aunque algunos medicamentos existentes han mostrado resultados prometedores, al igual que ofrecer incentivos como tarjetas de regalo para que las personas se mantengan alejadas de los estimulantes.
Los estadounidenses han estado ansiosos por cualquier señal de esperanza en medio de la crisis de sobredosis, pero los expertos han advertido contra declarar la victoria demasiado pronto en reacción a los cambios año tras año en las muertes por sobredosis.
Por ejemplo, investigadores de la Universidad de Pittsburgh descubrieron que la última vez que las sobredosis fatales disminuyeron a nivel nacional en 2018, la desaceleración coincidió con regulaciones más estrictas en China sobre el carfentanilo, un opioide sintético muy potente. Al año siguiente, las muertes por sobredosis de drogas volvieron a aumentar.
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