Hamdan hizo los comentarios durante una entrevista con Al Jazeera el lunes por la tarde, hora local, después de la reunión del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, con Netanyahu en Israel y el anuncio de que Netanyahu había expresado su apoyo a la propuesta puente respaldada por Estados Unidos.
Hamdan dijo que el movimiento había aceptado una propuesta de tregua enviada por la administración del presidente estadounidense Joe Biden el mes pasado.
“Aceptamos la propuesta presentada por Biden, pero la administración estadounidense no logró convencer [Israeli Prime Minister Benjamin] Netanyahu”, añadió.
“Los israelíes dieron marcha atrás en las cuestiones incluidas en la propuesta de Biden”.
Tras el cambio de sentido de Tel Aviv, Estados Unidos, Egipto y Qatar, que han estado mediando en las conversaciones encaminadas a concluir un acuerdo de tregua, anunciaron que habían ideado un nuevo plan.
Blinken también afirmó posteriormente que Netanyahu había “aceptado” el plan.
Hamdan, sin embargo, afirmó que Hamás sólo aceptaría la implementación de la propuesta anterior.
La primera propuesta incluía, entre otras cosas, un alto el fuego permanente, la retirada del régimen de Gaza y un proceso de reconstrucción.
El portavoz de Hamás subrayó asimismo que cualquier acuerdo “debe incluir cinco puntos específicos, entre ellos el cese de la agresión, la retirada de Gaza y la reconstrucción”.
“Seguimos comprometidos con nuestras obligaciones y estamos dispuestos a implementarlas de inmediato. Quien obstaculiza los esfuerzos para llegar a un acuerdo es Netanyahu”, subrayó.
Haciendo caso omiso de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que exige un alto el fuego inmediato, Israel ha continuado su brutal ofensiva contra Gaza desde un ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023.
Desde entonces, el ataque israelí ha matado a más de 40.130 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, y ha herido a más de 92.740, según las autoridades sanitarias locales.
Más de 10 meses después del ataque israelí, vastas zonas de Gaza yacen en ruinas en medio de un bloqueo paralizante de alimentos, agua potable y medicinas.