Abbas Araghchi, elegido por el presidente iraní para ministro de Asuntos Exteriores, enfatizó que la nueva administración continuará aplicando una sólida política de buena vecindad, con el objetivo de maximizar las oportunidades políticas y económicas con los países vecinos, al tiempo que busca ampliar los vínculos con China, Rusia y todas las demás naciones. que apoyó a Irán frente a las sanciones encabezadas por Estados Unidos.
Al presentar sus planes ante el parlamento iraní el domingo, Araghchi destacó el papel proactivo e influyente que desempeñará el Ministerio de Asuntos Exteriores en los asuntos regionales y globales.
Araghchi destacó que China, Rusia y otras naciones que apoyaron a Irán durante las sanciones, así como las potencias emergentes de África, América Latina y Asia Oriental, tendrán prioridad en las relaciones exteriores del gobierno.
También mencionó que si Europa cesa sus acciones hostiles hacia Irán, esto también podría considerarse una prioridad.
Respecto a Estados Unidos, Araghchi confirmó que la política será de “gestión de la hostilidad”.
Reiteró que el gobierno está comprometido a neutralizar las sanciones encabezadas por Estados Unidos y al mismo tiempo trabaja para levantarlas, y enfatizó que cualquier esfuerzo para eliminar las sanciones será medido y evitará negociaciones prolongadas.
Araghchi aseguró que el Ministerio de Asuntos Exteriores se mantendrá vigilante en sus funciones para aliviar las sanciones, aprovechando experiencias pasadas para evitar decisiones apresuradas.