El BAXI Manresa puso punto final a la temporada después de caer en el Nou Congost ante el Unicaja por un concluyente 63-86. Una noche aciaga en el tiro exterior, especialmente en el triple (7 de 37) les condenó a una dura derrota para cerrar la campaña. Unicaja accede a semifinales, a la espera de rival en la serie entre UCAM Murcia y Valencia Basket.
BAXI
63
86
UNI
Alineaciones
| (28+8+11+16): García (8), Badio (10), Robinson (7), Sagnia (2), Geben (5)-cinco inicial-, Williams (12), Steinbergs (0), Taylor (2), Mawugbe (0), Vaulet (6), Oriola (8), Pérez (3). |
| (20+20+25+21): Díaz (6), Barreiro (5), Kalinoski (10), Ejim (10), Kravish (12)-cinco inicial-, Osetkowski (2), Djedovic (9), Sima (XX), Taylor (9), Carter (9), Lima (4), Thomas (6), Sima (4). |
Mucha igualdad entre ambos conjuntos al inicio, que trataban de imprimir mucho ritmo al duelo. Barreiro tienía que dejar el partido, sangrando en una mejilla y es que cada acción se lucha a muerte, con un BAXI totalmente metido, y consciente que si no mete presión y dureza, los malagueños tienen todas las de ganar.
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Pero la intensidad del equipo de Pedro Martínez dio sus frutos, controlando el ritmo, y cerrando el cuarto con un espectacular triple de Travante Williams para dar a los manresanos nada menos que ocho puntos de renta (28-20).
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El BAXI Manresa siguió con su plan de juego, sin dejar respirar a los exteriores como Taylor y dentro maniataba a Kravish y Lima, aunque los de Ibón Navarro siempre encontraban el aro contrario, y no le perdían la cara al duelo (32-29).
Esfuerzo inicial sin premio
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El esfuerzo de los locales tenía poco premio en el marcador. Había que seguir bregando aunque los muchos triples errados de los manresanos dieron la oportunidad a Unicaja a darle la vuelta al marcador con los triples de Kalinoski que hacían daño (36-40).
El BAXI puso intensidad pero no fue suficiente / EFE
Un parcial para los visitantes de 8-20, con 0 de 9 en triples para los de Pedro Martínez, daba una renta de cuatro al descanso para Unicaja, que supo esperar su momento y situarse al frente.
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En la reanudación, Unicaja metía la directa con un parcial de 2-11 en la que las diferencias crecían pronto para los visitantes (38-51). Pedro Martínez paró el encuentro, tratando de que los malagueños no pusieran la directa, pero estaban claramente en control (45-58).
Diferencia insalvable
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Los de Pedro Martínez se obcecaban en tirar triples que no entraban (4 de 26) y así era muy difícil recortar diferencias. Al contrario, Unicaja lograba una máxima de 16 (47-63) en una tarea prácticamente imposible para los locales. Las fuerzas empezaban a flaquear, en la pista y en la grada. Al final del cuarto, 18 arriba de Unicaja y el partido y la serie, sentenciados (47-65).
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Travante Williams lucha por un balón con Taylor / EFE
El cuarto final fue un suplicio para el BAXI, que vio como Unicaja siguió ampliando la renta ante el conjunto de manresano totalmente entregado y condenado por su pobre acierto en el triple para caer por 63-86 y poner punto final a la temporada.
